Prevención desde niños clave para la salud cardiovascular en adultos
Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en adultos en los Estados Unidos, y aunque en niños no lo son, la prevención que se practique desde temprana edad jugará un papel importantísimo en su salud futura. Cuando se trata del corazón, hay varios factores de riesgo que son modificables; es decir, podemos controlarlos para evitar diversas condiciones. Entre ellos se encuentran:
- Presión arterial alta (hipertensión). Aunque esto es extremadamente inusual, la presión elevada en niños puede ser grave, y en muchas ocasiones no presenta síntomas. Asegúrese que le toman la misma en su chequeo anual especialmente si tiene historial familiar o si padece de otra enfermedad cardiaca o renal.
- Colesterol. Menos del 15% de los niños padecen de colesterol alto, pero la acumulación de este tipo de grasa puede comenzar a temprana edad y luego traer consecuencias en la adultez. Si hay historial familiar, se recomienda realizar un control de los niveles antes de los 5 años de edad. Otro factor importante que aporta a un posible nivel de colesterol alto es la obesidad, por lo que el control de peso en nuestros niños y adolescentes es crucial.
- Tabaquismo. Según el CDC, más de 3 millones de estudiantes de escuela media y secundaria son fumadores y 9 de cada 10 fumadores adultos comienzan el hábito durante la adolescencia. El tabaco se ha visto muy atado al desarrollo de enfermedades cardiovasculares, ya que estrecha los vasos sangíneos, causando así que el corazón tenga que trabajar más fuerte para bombear la sangre. Si necesita ayuda hablando con su adolescente sobre no fumar o sobre dejar de hacerlo, puede hablarle de los efectos que tiene fumar en sus pulmones (en especial si son atletas), el efecto en los dientes y en el aliento y sobretodo, conviértase en ejemplo a seguir — si usted fuma, déjelo.
- Obesidad. La obesidad en Estados Unidos se ha convertido en una epidemia en donde 1 de cada 3 adultos la padece. Aunque en niños es menor, en los pasados años se ha visto un incremento significativo y preocupante. Esto ha traído consigo diagnósticos de Diabetes Tipo 2, que antes solían verse solo en adultos. En la mayoría de las ocasiones la obesidad es causada por un exceso de calorías; es decir, que el niño consume alimento de más que no quema con ejercicio. En otras ocasiones puede ser causada por factores genéticos o por alguna enfermedad o trastorno. Si cree que su hijo está obeso, consulte con su pediatra para identificar la causa y establecer un plan de acción en beneficio a su salud.
- Inactividad física. Este factor puede ocasionar muchos de los factores de riesgo anteriores como la presión arterial alta, colesterol elevado y sobrepeso u obesidad. La actividad física ayuda a controlar el peso, a fortalecer los huesos, a la salud cardiovascular y a una salud mental y autoestima saludable. La Asociación Americana del Corazón recomienda que todo niño mayor de 5 años realice 60min de actividad física moderada y alta todos los días.
Si encuentra que este listado de factores de riesgo es similar al de los adultos, está en lo correcto. Aunque pensemos que los niños tienen más resistencia a muchas cosas por su hermosa juventud, la prevención es la misma y uno de los regalos más grandes que les podemos dar es inclulcar hábitos saludables que les duren toda la vida en pro de su salud a largo plazo.
Fuente: texasheart.org